Espíritu

Nombre no oficial

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Espíritu
Manga Anime Videojuegos Anime 1997 Películas y Memorial Edition Anime 2016 Seima Senki no Shō Sword of the Berserk Berserk Musou

Primera aparición
Manga	Publicación 2
Anime (1997)	Episodio 1 (anime 1997)
Película	Berserk: La Edad de Oro III - El Advenimiento
Memorial Edition	Episodio 13 (Memorial Edition)
Anime (2016)	Episodio 1 (anime 2016)

Este tipo de seres conforman una de las apariciones sobrenaturales más comunes en el mundo de Berserk. Son difuntos que se aferran a la vida después de muertos, permaneciendo en el Intersticio y las capas exteriores del Plano Astral. Vagan en grupos apegándose a los seres vivientes, anhelando su carne y sangre. Según Guts, atravesarlos se asemeja a cortar el agua. Desaparecen con la luz del sol.

Habilidades[]

Poseen poderes de posesión, tal y como se vio en el caso de Collette y en el del caballo de Farnese de Vandimion, empujándolo a violar a la joven. Más tarde, en San Albión, poseyeron a los que participaban en el Culto de la Diosa del Fuego. En el videojuego Sword of the Berserk: Guts' Rage, toman los cuerpos del cementerio de la base de la Resistencia, e intentan atacar a Casca cuando esta se encuentra encerrada en la cárcel con Puck tras haber sido encontrada por Balzac. También intentan poseer a Guts, lo que hace que su odio interior busque asesinar a Casca. Desde entonces, Casca tiene miedo de acercarse siquiera a Guts, lo que le mortifica.

Juzgando por lo ocurrido en la noche en la que Guts secuestró a Farnese y lo visto tras los sucesos del Valle de la Niebla, los espíritus pueden escudriñar los pensamientos más oscuros de los seres humanos, usándolos en su contra.

Este poder de posesión de lo que anteriormente no tenía vida es lo que anima a los zombis, los árboles demoníacos y a los hombres de nieve, así como al hombre de mimbre usado por Morda en Skellig.

Historia[]

Aparecen por primera vez atacando a Collette y a su padre usando cadáveres como vehículo para lanzar sus ataques. Sus apariciones crecen cuando Guts y Casca son marcados con el Estigma del Maldito, ya que les atrae. De hecho, la primera toma de contacto que tiene Guts con su nueva realidad tras el Eclipse es en forma de una lucha, usando la espada del Caballero de la Calavera para repelerlos y prometiendo luchar contra los seres de la oscuridad hasta el final.

El siguiente papel importante que tuvieron fue en la Ceremonia de Encarnación en la torre de la condena: muchos espíritus se vieron atraídos allí por el odio y rencor, llevando a la destrucción de San Albión y acelerando la ceremonia.

Otros espíritus[]

Niños en llamas[]

Durante la estancia nocturna de Guts en una cueva entre el pueblo de Jill y el Valle de la Niebla, el niño demoníaco se presenta ante el ex-mercenario con espíritus.^[1] Estos espíritus tienen formas infantiles en llamas, llorando y buscando a sus madres. Guts se lanza contra ellos blandiendo su Matadragones como un maníaco. Uno de ellos se acerca a Jill, y Guts reacciona de forma casi mortal para la joven. Al protegerla, los espíritus se abalanzan sobre el Espadachín Negro, y tanto él como Jill -así como Puck, posado en la joven- caen por un terraplén.^[2]

Esclavos de Kushan[]

En Vritannis, se usan esclavos de Kushan debido a las características mercantes de la ciudad y cómo la Santa Sede (la cual usa la ciudad como su centro de operaciones navales) ve a los habitantes de dicho imperio como enemigos religiosos. Debido al inicio de la guerra, un grupo fue ahorcado para aumentar la moral. Cuando el Nuevo Grupo de Guts llega a la ciudad, Schierke es guiada por el espíritu de uno de los cadáveres hacia la zona donde fueron ahorcados. Allí, la bruja descubre lo ocurrido tras sentir una de las sogas y preguntar a los guardias, a quienes "encanta" para que le ayuden a darles un último descanso.

Al contrario que los otros espíritus, no parecen tener sentimientos antagónicos, sino de lástima ante su situación, suplicando ser liberados.